Architects
b720 Fermín Vázquez Arquitectos
Photography
Nava-Rapacchietta
Place
Milan, Italy
Tradición e innovación se daban la mano en el Pabellón de España de la Expo Universal de Milán 2015 cuyo lema era “Alimentar el planeta. Energía para la vida”. Desde el 1 de mayo hasta el 31 de octubre, millones de personas tuvieron la oportunidad de visitar este gigantesco invernadero, cuya imponente estructura, realizada exclusivamente con materiales naturales y reciclados, se extendía sobre una superficie de aproximadamente 2500 m2. Bautizado como “El Lenguaje del Sabor”, este ingente proyecto arquitectónico a cargo del estudio barcelonés b720, Fermín Vázquez Arquitectos, aunaba otras dos características primordiales: la sostenibilidad medioambiental y la eficiencia energética.
Las propuestas gastronómicas del pabellón corrían a cargo del conocido grupo hostelero Sagardi que dispuso, para ello, dos espacios: el restaurante El Altillo y el bar de tapas Ses Salines. Para el amueblamiento de ambos se utilizaron piezas de Expormim, como los sillones tejidos de la colección de exterior Nido, que firma Javier Pastor, y el sofá modular Plump, de Studio expormim, ubicados en el primero de los ambientes. Para el bar de tapas, en cambio, se eligieron las sillas tejidas Out_Line, también de exterior y altamente resistentes, una creación de la diseñadora valenciana Nieves Contreras. Estas se combinaron con la luz ambiental de las lámparas para exterior Meridiano, de Vibia, sin duda, una de las empresas de iluminación españolas más importantes. Un pabellón efímero por el cual pasaron más de dos millones de visitantes. El mejor de los escaparates.
Architects
b720 Fermín Vázquez Arquitectos
Photography
Nava-Rapacchietta
Place
Milan, Italy
Tradición e innovación se daban la mano en el Pabellón de España de la Expo Universal de Milán 2015 cuyo lema era “Alimentar el planeta. Energía para la vida”. Desde el 1 de mayo hasta el 31 de octubre, millones de personas tuvieron la oportunidad de visitar este gigantesco invernadero, cuya imponente estructura, realizada exclusivamente con materiales naturales y reciclados, se extendía sobre una superficie de aproximadamente 2500 m2. Bautizado como “El Lenguaje del Sabor”, este ingente proyecto arquitectónico a cargo del estudio barcelonés b720, Fermín Vázquez Arquitectos, aunaba otras dos características primordiales: la sostenibilidad medioambiental y la eficiencia energética.
Las propuestas gastronómicas del pabellón corrían a cargo del conocido grupo hostelero Sagardi que dispuso, para ello, dos espacios: el restaurante El Altillo y el bar de tapas Ses Salines. Para el amueblamiento de ambos se utilizaron piezas de Expormim, como los sillones tejidos de la colección de exterior Nido, que firma Javier Pastor, y el sofá modular Plump, de Studio expormim, ubicados en el primero de los ambientes. Para el bar de tapas, en cambio, se eligieron las sillas tejidas Out_Line, también de exterior y altamente resistentes, una creación de la diseñadora valenciana Nieves Contreras. Estas se combinaron con la luz ambiental de las lámparas para exterior Meridiano, de Vibia, sin duda, una de las empresas de iluminación españolas más importantes. Un pabellón efímero por el cual pasaron más de dos millones de visitantes. El mejor de los escaparates.